Una cita del Quijote al día: 22 de enero de 2011

EL MONICONGO, ACADÉMICO
DE LA ARGAMASILLA, A LA SEPULTURA
DE DON QUIJOTE

Epitafio

El calvatrueno que adornó a la Mancha
de más despojos que Jasón de Creta;
el jüicio que tuvo la veleta
aguda donde fuera mejor ancha;

el brazo que su fuerza tanto ensancha,
que llegó del Catay hasta Gaeta;
la musa más horrenda y más discreta
que grabó versos en broncínea plancha;

el que a cola dejó los Amadises
y en muy poquito a Galaores tuvo,
estribando en su amor y bizarría;

el que hizo callar los Belianises,
aquel que en Rocinante errando anduvo,
yace debajo desta losa fría.

Capítulo LII, 1ª parte

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